Por obvias razones no fui a cenar al restaurante de las señoras malgeniadas entonces, opté por comprar otra cosa para comer, mire tele un rato, leí una revista y descansé hasta el otro día.
Con más claridad escuché a los pajaritos trinar, los gallos cantar y los perros ladrar. Había amanecido. En una de las esquinas del parque me encontré con Lucho y en su moto me llevó hacia el sitio de encuentro del segundo día: el Hogar Piedra del Sol. Una casa muy bonita, con zonas verdes y la gigante piedra del sol analizada por arqueólogos y antropólogos pues en ella están inscritas figuras indígenas que dan cuenta del legado histórico Berruequeño. En el interior de la casa reposaban geranios vistosos y al fondo estaban sentados los abuelitos del hogar quienes nos miraban de reojo.
Esta segunda y última jornada del encuentro la dedicamos al trabajo y elaboración de la matríz de contexto y de los relatos. Se dividió el grupo en dos y cada uno narró la importancia de conservar las fuentes hidrográficas. A partir de sus relatos construyeron los guiones de forma creativa otorgándole más vida a ese preciado líquido.
Con más claridad escuché a los pajaritos trinar, los gallos cantar y los perros ladrar. Había amanecido. En una de las esquinas del parque me encontré con Lucho y en su moto me llevó hacia el sitio de encuentro del segundo día: el Hogar Piedra del Sol. Una casa muy bonita, con zonas verdes y la gigante piedra del sol analizada por arqueólogos y antropólogos pues en ella están inscritas figuras indígenas que dan cuenta del legado histórico Berruequeño. En el interior de la casa reposaban geranios vistosos y al fondo estaban sentados los abuelitos del hogar quienes nos miraban de reojo.
Esta segunda y última jornada del encuentro la dedicamos al trabajo y elaboración de la matríz de contexto y de los relatos. Se dividió el grupo en dos y cada uno narró la importancia de conservar las fuentes hidrográficas. A partir de sus relatos construyeron los guiones de forma creativa otorgándole más vida a ese preciado líquido.
El colectivo Arboledense trabajó con entusiasmo, con seguridad de sus capacidades y fortalezas; el buen sentido del humor que tienen sus integrantes le imprime al grupo alegría y confianza. Son compañeros, amigos y hermanos.
Muchos momentos enmarcados en las fotografías, en la memoria y en los corazones. Regresé con la convicción de que ahora soy mejor persona, mejor profesional y todo ¿por qué? Por que cada persona con la que trabajo, afianza mi vocación frente a la comunicación y a la comunidad.
Muchos momentos enmarcados en las fotografías, en la memoria y en los corazones. Regresé con la convicción de que ahora soy mejor persona, mejor profesional y todo ¿por qué? Por que cada persona con la que trabajo, afianza mi vocación frente a la comunicación y a la comunidad.
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